Vivir en una casa como está puede ser muy estresante. En un momento te cuento por qué, pero antes deja que te comente algo:
Se puede vivir mejor que en una urba-colmena. En una casa independiente hecha a medida vas a disfrutar mejor de la vida y es una inversión que a la larga casi seguro te interesa.
La puedes hacer en una zona que te guste: rodeado de verde, dentro de la ciudad, al lado del mar…Podrás tener total privacidad, nada de vecinos ruidosos y cero curiosos. Podrás tener mucho espacio y mucha luz, tu jardín, tu huerto, una piscina para los críos…Es una oportunidad para vivir como siempre has querido.
En definitiva, hacerte una casa a medida es regalarte a ti y a tu familia la comodidad y la calidad de vida que se merecen.
Porque si vienes de vivir en una calle muy concurrida, con muchos coches, al lado de un colegio o con bares debajo, y te has acostumbrado a todo ese ruido y a que siempre haya mucha gente…puede que al entrar a tu nueva casa, al caer la noche, no escuches nada, y tanto silencio al principio te descoloque.
Pero luego, vivir en tu propia burbuja de paz y tranquilidad, no tiene precio.
Depende.
¿de qué?
Del lugar dónde la quieras hacer, de las condiciones del terreno, de las calidades que te gusten, etc, etc. Calcula 1700€ el metro cuadrado. Eso sin contar lo que te cueste la parcela, que va aparte.
Lo es. Hablamos de una casa diseñada por un arquitecto especialmente para ti, tus necesidades y deseos.
Un legado que dejar a tus hijos, una propiedad que podrá pasar de generación en generación en tu familia. Y que, al hacerla “por libre” en lugar de comprarla a una promotora, ya te ahorras el 20 – 30% que les suman ellos de beneficio.
Estamos hablando de una casa que puedes hacer tan eficiente y sostenible como quieras: puedes poner aerotermia, suelo radiante, buen aislamiento…y ahorrarte hasta un 80% en la factura de energía.
Es, definitivamente, un valor seguro.